Iggy Pop versus The Thin White Duke.

En la banda sonora de nuestra existencia guardamos canciones fetiches .Pasé muchos años de pasajero con rutinas de autobús : la misma hora , las mismas paradas , la misma gente pasando muchos instantes de una vida detrás de un cristal empañado .Durante unas horas me transformaba en un pájaro aprisionado en cuerpo que volaba en los cortos sueños , en aquella jaula móvil mi espíritu escapaba de la costumbre adquirida a través de la lectura , los sueños , la música y las ilusiones.
Todavía mantengo anclajes sobre esos momentos de monotonía en el albor del día cuando monto en un tren o en un bus .Existe una canción que me vampiriza por su hipnótico ritmo de rutina :
The passenger.La letra refleja ese desasosiego a un ritmo pausado mientras observas la vida detrás del cristal con la ciudad dormida. Iggy Pop recogió esta pieza magistral en el album Lust For Life .
En plena efervescencia del punk , "la iguana " ,bautizado por muchos como padrino del movimiento, da un giro a su alicaída carrera viajando a Berlín.Iggy se había convertido en un mito decadente desde la separación de los Stooges.Había seguido un camino de autodestrucción y excesos sin poder verse capaz de encontrar salida hasta que David Bowie le tendió su brazo protector.

Rodeados por un ambiente decadente de una ciudad de dualidades con el muro de fondo descubrieron la vida cabaretera ,libertaria y cool . Encontraron un pretexto para combinar creatividad , agujas y disfrute de la vida .Bowie grabaría en este periodo tres LPs .Iggy con ayuda de su mentor, lanza al mercado "the Idiot" y "Lust for life",disco que alberga " The passanger".
Melancolía y nocturnidad aunadas en una letra que algunos consideran inspirada en un poema de Jim Morrison.Autoconservación y magnetismo que recoge el espíritu de Baudelaire ,poesía rock en las cloacas de la oscuridad de dos vampiros ,pasajeros de las sombras que festejan su ritual a toda velocidad escapando de la rutina del día.
Todo está entrelazado , en el año 1975 , Antonioni lanzaba en las pantallas una película con el mismo título que recoge la soledad , el desarraigo y la huida a parajes exóticos .Testigo recogido por los dos nómadas del rock.Un viaje musical que también me acerca al primer Lars Von Trier que descubrí en los 80 con películas como Europa con su hipnótico comienzo de cuenta atrás y vías de un viaje de desolación interior.

Siguiendo en el cine ,el magnetismo de la estrecha relación de estos dos divos de la escena rock de los primeros 70 se refleja en Velvet Goldmine...

Para cerrar el fin de semana dejo dos versiones , Souxie y producto nacional...